RECordando

A veces me niego a escribir, como ahora, pero algo dentro de mí, o tal vez fuera, o tal vez no sé, me obliga a hacerlo, a compartir acerca de mi pensar ultimamente.

Anoche, o antenoche, sin querer, decidí volver al tradicionalísimo padre nuestro por la noche antes de dormir, recitándolo de memoria más que de corazón, continué hasta terminar, meditando en él.
Automáticamente mi boca comenzó a declarar una oración contínua al padre nuestro, el cual solía rezar cuando era pequeño y más obediente que sensible.
"En paz me acostaré y así mismo dormiré, porque sólo tu Jehova me haces dormir confiado"
Recuerdo aún que lo repetía tantas veces como podía, hasta conciliar el sueño que cuando era más pequeño era difícil de cumplir por temor y ciertas razones que no tocaré en este momento.
Me recordó a mi infancia mi modo de rezar, sonreí mientras me escuchaba repetirlo como cuando era un niño. Extrañamente, mi boca no se detuvo, sino comenzó otra oración tan común y que tanto repetía como la anterior. "Dios te pido que a mi madre le concedas la juventud eterna".
Me escuché decirlo y pensé "wow, que sueños tan hermosos de un niño que ama a su madre".
Por un momento me angustié; recordé cuando era pequeño y lo peor que me podía pasar, era no tener más a mi madre, recuerdo cierta ocasión que yo le decía que cuando ella muriera, moriría con ella, que la vida sin ella para mí no tendría más sentido. A pesar de su renuencia a mis peticiones, yo siempre consideré aventarme a la tumba de mi madre cuando ella muriera, para estar con ella siempre, pensaba en un ataúd para dos, pensaba muchas cosas, tontas, locas, pero llenas de amor.
El amor incondicional de un pequeño niño a su madre, el cuál reflejaba su inseguridad a la vida, su amor y completa dependencia de su madre.
Ciertamente ese amor sigue, y ha venido creciendo, pero afortunadamente he madurado y gracias a Dios he entendido, que si mi madre algún día muriera, yo estaría contento, y conciente que ya está en un lugar mejor que aquí, de lo cual ambos estamos convencidos.
No pienso ahora aventarme con ella, ni me aterra la idea de que me falte como antes, ese amor dependiente a ella, se ha convertido en conocimiento y entendimiento.
Después de repetir esas oraciones de tradición cuando era pequeño, sonreí, disfruté imaginando la tierna escena de un niño declarándole tal amor a su madre, que sería capaz de morir con ella.

2010

No soy una persona que realmente festeje mucho esto del año nuevo, ni del año viejo, tal vez que en mi familia no me fue inculcado una especie de respeto por dichas fechas, o por la poca celebración, realmente no lo sé, pero la verdad yo tomo cualquier día para comenzar lo que realmente me interesa.
De cualquier forma, por mi mente pasaron algunos propósitos hace un momento, entre ellos viajar a londres este año, aprender a tocar muy bien el piano y la guitarra, conseguir una novia y ayudar a toda la gente que me sea posible, ser más amigo.
En la cena de año nuevo, mientras veía un video de viva la vida de coldplay, pensé que grandes obras de arte en europa son poco valoradas, grandes maravillas visuales son desaprovechadas y pensé que tal vez el estar por allá podría inspirarme un poco como los grandes pensadores e inventores alguna vez se detuvieron a admirar su belleza, por ahí decía mi maestro monreal que las personas que admiraban el arte de miguel angel, despertaban un sentido diferente, y la verdad creo que no está tan lejos de la realidad, el en verdad apreciar el arte sería una experiencia diferente que haría de mí alguien más especial.
Tal vez descubriría realmente todos mi dones y dotes artísticos para complacerme, y después a los demás.
La verdad, no lo sé, de ahí mi idea de ir a londres, y europa, no tengo ni idea de como lo haré pero sé que el Señor pondrá los medios, estoy seguro. No ha fallado y su promesa de prosperidad ha sido mostrada a mi durante este año.
Tal vez con esa palabra podría describir el año que pasó, Prosperidad.
Hace algunas noches cuando volvía de jugar poker o algo por el estilo, algunas silenciosas lágrimas rodaron por cara, haciéndome sentir una de las personas más afortunadas de este mundo.
El año pasado en la cena de promesas Dios había manifestado hacia mí que me cuidaría, y confié. En una de esas noches de meditación reveló a mi la fórmula de la prosperidad, pero dirigida a mi madre, lo único que pude hacer fue ser un instrumento y comunicárselo.
Las personas que hayan entrado a mi baño habrán visto la nota que le escribí, después de una charla el día siguiente, ella comenzó a actuar, pasaron así varios meses, en los que fuimos puliéndonos, invitando a desayunar, comer y cenar a toda la gente que era posible, siendo de ayuda a ellos.
Tengo que confesar que desde hace tiempo las cosas no son iguales en casa, poco tiempo antes de la partida de papá, comenzamos a estar en el desierto, el dinero no era el mismo al que estabamos acostumbrados y las cosas parecían no mejorar, durante todo ese tiempo Dios estuvo con nosotros, y nos mantuvo firmes en el desierto durante todos esos años, hasta que por fin se reveló ante mí, o tal vez por fin estuve suficientemente atento y sensible para oír su voz.
Atendimos y esa noche que volví, las pocas lágrimas de gratitud fueron al voltear a ver que después de mucho tiempo, tal vez años, la despensa estaba llena, tanto que no cabía en la alacena, viendo mucha comida arriba de la estufa y al abrir el refrigrador completamente lleno.
Fue un sentimiento humano inevitable el sentirme privilegiado por papá porque a pesar de no ser el jóven promesa, el seguía siendo fiel, muy muy fiel.
Me sentí reconfortado a seguir haciendo las cosas bien, y ayudar a los demás. Me identifiqué como esa viuda con su hijo quien alimenta a Elías con su última porción de harina y aceite para después morir de hambre y al serle obediente la harina y el aceite jamás se acabó.(1er Libro de Reyes 17).
Tal vez no sea merecedor de lo que tengo, pero estoy realmente agradecido.
PD: Que mezcla de post, ojalá no les parezca tan aburrido, lo siento, lo tenía que expresar.
De cualquier forma aprovecho lo del año nuevo y eso para celebrar, que si me gusta un poco más que eso del año nuevo y eso.
Un abrazo, espero que aprovechen estas fechas para descansar y tomar el mejor humor posible de sus seres apreciados.

José A. García R. (el soñador)